DIVAGANDO

En muchas ocasiones, la gran parte de nosotros, nos hemos encontrado en un momento instrospectivo divagando en nuestras mentes y retorciendo alguna idea que se nos posa en la cabeza. Tampoco se presta a un tema de discusión cotidiano, ya que la gente no le gusta hablar de lo que saben no entienden, a diferencia de lo que no saben pero si se prestan a asumir, como el estatus político, que religión es mejor y porque  persona debe morir por lo que hizo/dejó de hacer.  Ustedes saben, cosas socialmente aceptadas. 

Y bueno, ¿qué tal si el pensamiento fuera como onda de sonido, que va flotando en un movimiento contínuo, totalmente invisible para nuestros ojos, pero como flotante al fin y es recibida por nuestro cuerpo que sirve de antena ante tal señal?.  ¿Y qué tal si debido a nuestra diferente programación y/o niveles de educación e imaginación no se escucha el mensaje completo, que sería sinónimo de no escuchar el mismo mensaje?.

Quizás hay momentos donde uno se encuentra más alerta y el mensaje puede dársele más importancia del que tiene debido a lo ambiguo que este pueda ser.  Quizás esta uno en busca de algo, entonces tiene que decidir si fue sincronía o una de esas 1 en 1000 ocasiones donde las cosas simplemente pasan.  Después de todo, no todo el mundo cree en las sincronizaciones.

Si esta idea fuera a tener alguna validez, significaría que no somos dueños de nuestros pensamientos ni nuestras ideas.  Y de esta forma los pensamientos que tenemos  son simplemente una falsa realidad ya que todos nos alimentamos del mismo mecanismo.